martes, 8 de diciembre de 2009

Tu alma...

No puedo controlar las ganas de protegerte del daño
que puedo llegar hacerte, no puedo controlar este deseo
de querer amarrar tu alma y no soltarla jamás.
Es este deseo que me destruye el alma y que sólo
hace que te desee más y más.

Es que verme lejos de ti, sin ti, sólo me queda más
que pedirle a la vida que me lleve, que me haga estar
en un mundo paralelo, en un mundo donde no te recuerde más.
Sé que incluso en la eternidad de mis días te recordaré
y si no te tengo mi alma sólo puede ser una alma
errada que no puede seguir resistiendo este dolor
que me produce tu lejanía.

Y es que me es imposible no querer desear tu cuerpo,
de hacer tu cuerpo parte del mio, de que tu alma y
mi alma sean una sola alma, y protegerte de mi, del resto,
del sufrimiento, de las distancias, que matan mi
ilusión.

Y es que es tanto el deseo de querer tenerte
enredada en mis brazos que mataría porque nadie
más tocara tu increíble alma.

Te hago una promesa y es que jamás por mucho que mi
vida dure siglos de eternidad, jamás te olvidaré,
jamás dejaré tu alma de lado y por sobretodo
jamás dejaré que otro use tu alma, que otro
rompa tu corazón y es que me es imposible olvidar
todo lo que un día me diste, y es que me es imposible
poder soportar este dolor que siento desde que
te fuiste.


"...Son millones de momentos imaginándote perdida en mi..."

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